Típica ermita del barroco valenciano, situada muy próxima al casco urbano de Alcalà. Desarrolla tipología de cruz griega, con planta rectangular y con dos pequeñas alas a la cabecera: la sacristía, a la izquierda, y la vivienda del ermitaño, a la derecha.
La cúpula es redonda en su interior, y octogonal y apuntada en el exterior. Está cubierta de tejas vidriadas azules y blancas en los ángulos.
La portada es de orden dórico-toscano, con un ondulado frontón. El frontis se cierra con una sencilla cornisa de perfil mixtilíneo, coronado por una espadaña.